La previa del encuentro entre las selecciones de Colombia y Bolivia, por las eliminatorias sudamericanas, se ha visto empañada por un escándalo de espionaje. La selección colombiana denunció que uno de sus entrenamientos fue objeto de vigilancia por parte de una persona vinculada a la federación boliviana.
Según las declaraciones del entrenador colombiano, Néstor Lorenzo, se identificó a un individuo tomando fotografías desde una edificación cercana al lugar de entrenamiento. "Es lamentable que te manden a espiar", expresó Lorenzo, visiblemente molesto por la situación. "Tenemos fotografiada a la persona de todo", agregó.
Este hecho ha generado gran polémica en el mundo del fútbol, pues se considera una violación a la privacidad y una falta de respeto hacia el rival. La Federación Colombiana de Fútbol ha anunciado que tomará las medidas legales correspondientes.
A pesar de este incidente, Colombia llega a este partido con un historial positivo en suelo boliviano, donde no pierde desde hace 21 años. Sin embargo, la altura de La Paz, a 4.150 metros sobre el nivel del mar, representa un desafío adicional para los jugadores colombianos.
Para este encuentro, el técnico Lorenzo ha planteado una alineación con experiencia en altura, buscando asegurar un resultado positivo que los acerque a la clasificación al Mundial de 2026.
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